Una nueva batería quiere cambiarlo todo en el coche eléctrico: adiós al litio

Una nueva batería quiere cambiarlo todo en el coche eléctrico: adiós al litio

En la evolución imparable del vehículo eléctrico, el componente estrella y, a la vez, uno de los principales retos tecnológicos sigue siendo la batería. Durante años, el litio ha sido el rey indiscutible de esta industria, dominando desde los coches eléctricos hasta los dispositivos móviles. Pero hoy, un nuevo actor irrumpe con fuerza y pretende cambiar las reglas del juego: las baterías basadas en sodio-hierro.

El sodio, el ingrediente común que quiere desbancar al litio

La tecnología avanza en busca de materiales más abundantes, accesibles y seguros. El sodio, presente en la naturaleza en grandes cantidades, se postula como una alternativa de futuro para las baterías, gracias a su bajo coste y mayor sostenibilidad ambiental. Esta apuesta no es reciente, pero la innovación actual ha permitido que startups como Inlyte, desde California, estén llevando esta tecnología a niveles antes inimaginables.

Además de su economía y sostenibilidad, uno de los aspectos cruciales a tener en cuenta en las baterías es la seguridad. Aquí cobra vital importancia el uso del extintor y otros equipos de protección contra incendios, especialmente porque las baterías, y en concreto las de litio, pueden presentar riesgos de incendio si no se gestionan correctamente. En este sentido, las nuevas baterías de sodio-hierro ofrecen una ventaja significativa al minimizar ese peligro.

¿Por qué las baterías de sodio-hierro pueden ser la revolución en coches eléctricos?

El coste es uno de los factores más decisivos para la masificación del vehículo eléctrico. Mientras que las baterías de litio oscilan en torno a los 139 dólares por kWh, las de sodio-hierro podrían reducir ese coste a apenas 35 dólares por kWh. Esta diferencia no solo abarataría el precio final de los coches eléctricos, sino que también impulsaría la implantación de energías renovables, permitiendo almacenar electricidad solar y eólica de forma económica y eficiente.

Por supuesto, la seguridad es otro punto crítico. Las baterías de litio han demostrado vulnerabilidades que pueden derivar en incendios o explosiones en casos de fallo o daño. Por ello, la instalación de un extintor comprar adecuado y sistemas de protección contra incendios son esenciales para garantizar la seguridad, tanto en el ámbito doméstico como industrial.

Innovación y trayectoria: cómo Inlyte impulsa esta tecnología

El concepto de baterías de sodio-hierro no es nuevo; ya en los años 70 la empresa Beta Research intentó desarrollarlas sin éxito comercial. Sin embargo, décadas después, Inlyte ha retomado esta idea con una tecnología avanzada y viable. Con 8 millones de dólares en financiación y una alianza estratégica para producir en masa en EEUU a partir de 2027, la startup está validando sus prototipos y preparando el terreno para un futuro sin litio.

Durabilidad y rendimiento: superando expectativas

Una de las mayores ventajas de las baterías de sodio-hierro es su impresionante durabilidad. Inlyte asegura que sus celdas pueden superar los 7.000 ciclos de carga sin perder capacidad, lo que equivale a unos 20 años de uso constante. Esto las hace ideales no solo para coches eléctricos, sino también para el almacenamiento energético en hogares y grandes infraestructuras.

No obstante, existen desafíos técnicos que superar, como la menor densidad energética que implica un tamaño y peso mayores. Esto puede afectar la autonomía en vehículos eléctricos, aunque en aplicaciones estacionarias o vehículos con menos exigencia, su eficiencia y seguridad compensan con creces esta limitación.

La gestión del riesgo: apagar un posible fuego de batería de litio

El riesgo de incendio en las baterías de litio no debe subestimarse. Para ello, conocer cómo apagar fuego bateria litio es fundamental para garantizar la seguridad en talleres, almacenes y hogares que dispongan de coches o dispositivos con este tipo de baterías.

Por eso, la adopción de nuevas tecnologías más seguras como las baterías de sodio-hierro no solo representa un avance tecnológico sino un paso decisivo para reducir riesgos asociados y facilitar la implementación de equipos de protección contra incendios especializados. La seguridad debe ser siempre una prioridad para acompañar el crecimiento del vehículo eléctrico.

El futuro del coche eléctrico sin litio ya está aquí

La transición hacia baterías más económicas, seguras y duraderas parece inminente. Aunque las baterías de litio seguirán siendo protagonistas durante algún tiempo, la irrupción del sodio-hierro marca un antes y un después en la industria automovilística y energética. La combinación de innovación tecnológica, seguridad mejorada y costes reducidos abrirá la puerta a un coche eléctrico más accesible para todos.

En este camino, no podemos olvidar la importancia de contar con equipos y dispositivos adecuados para prevenir y combatir posibles incendios, donde un extintor y sistemas especializados juegan un papel clave para protegernos a todos y garantizar una transición segura hacia esta nueva era.